Justicia Verdadera

Justicia Verdadera

jueves, 30 de abril de 2020

Decreto sobre la Cuarentena y el Coronavirus


CASO 27-2017: Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)
DECRETO SOBRE LA CUARENTENA Y EL CORONAVIRUS
23 de Abril de 2020
VISTO la Sentencia y las actuaciones posteriores del “Caso CIDH” realizadas por el  Comité Internacional de Ética Budista, dictaminando a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) como Responsables de Violación a los derechos de los pueblos budistas y comunidades espirituales, Violación de los derechos humanos a la vida paz e integridad, y Violación al Derecho Internacional;
CONSIDERANDO:
Que el Comité Internacional de Ética Budista realizó en el 20 de septiembre de 2018 un Manifiesto sobre Torturas Carcelarias, exigiendo a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que investigue y juzgue los Crímenes contra la humanidad cometidos por el gobierno argentino y su patrón sistemático y generalizado de maltrato y abuso policial, detenciones arbitrarias y torturas realizadas por las fuerzas de seguridad argentinas, las cuales también suelen recurrir a la realización de cientos de ejecuciones extrajudiciales con total impunidad;
Que en dichas actuaciones post-sentencia se responsabilizó a la CIDH como Cómplice de Crímenes de lesa humanidad en caso de que ésta decida ignorar estas terribles violaciones a los derechos humanos que han sido denunciados no sólo por el Comité Internacional de Ética Budista sino también por organizaciones como la Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional (Correpi) y la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin);
Que de igual modo el presente Decreto dictamina Responsabilidad de la CIDH en la mantención de la impunidad de los Crímenes contra la humanidad que realiza el Estado Argentino con la excusa de la cuarentena por la pandemia del Coronavirus;
Que asimismo la no denuncia del comportamiento criminal del Estado Argentino forma parte de un patrón sistemático de la CIDH, por lo que su omisión es un acto de complicidad, cometiendo entonces un Alto Crimen contra las Libertades fundamentales intrínsecas;
Que se reconoce que el índice de mortalidad del Coronavirus no sería el 3,4% que informó la Organización Mundial de la Salud, ni tampoco sería el 1% como plantean estudios de China y Alemania, sino que como señalan importantes científicos de la Stanford University la verdadera mortalidad sería del 0,12%, tal y como afirman el epidemiólogo Ioannidis y otros colegas, siendo así muy similar a la letalidad de la gripe ordinaria, lo cual significa que las cuarentenas masivas son uno de los actos de psicosis colectiva más grandes de la historia al ser medidas totalmente desproporcionadas con respecto al problema que pretenden remediar;
Que las cuarentenas únicamente funcionan cuando un pueblo ha sido infectado y se lo cerca para que no infecte al resto de la población nacional o internacional, por lo que declarar una cuarentena para toda la población de un país es un acto de irracionalidad absoluta en tanto no se está realizando ningún tipo de separación entre los enfermos y los sanos;
Que la mayoría de las cuarentenas han sido declaradas por gobiernos con sistemas de salud deplorables, dado que los Estados han preferido invertir en armamento en lugar de invertir en salud, por lo que la cuarentena no sería un remedio sino que tan sólo estaría encubriendo la responsabilidad de los líderes políticos en tener un sistema sanitario que se desborda y produce miles de muertos ante la mera aparición de una enfermedad menor como lo es el Coronavirus;
Que la humanidad se encuentra padeciendo un grave Ataque de Pánico Global, siendo más necesaria que nunca la Salud Espiritual o Cura (Nirvana) del sufrimiento psicológico producido por llevar una vida infectada por las enfermedades de la codicia, odio y engaño que hacen que la humanidad tenga una obsesión con los rumores, la superficialidad y el mal de las redes sociales, propagando el virus de la ignorancia, el miedo y la separatividad entre las personas;
Que de conformidad con lo expuesto el gobierno argentino ha realizado un Golpe de Estado, pues el poder ejecutivo se ha adueñado del Estado y han dejado de funcionar los sistemas legislativo y judicial, incluso suspendiendo de facto los derechos civiles, lo cual es totalmente inconstitucional y también contrario a los tratados y convenciones internacionales de derechos humanos;
Que el gobierno argentino ha permitido que las administraciones locales de cientos de ciudades y provincias bloqueen de forma irracional, inconstitucional e ilegal los límites de los territorios y accesos de las calles o rutas para impedir el acceso de otros ciudadanos, e incluso se ha permitido que estos gobernantes ilegalmente obliguen a las personas a permanecer en sus casas, lo cual significa que han decretado ilegalmente un Estado de sitio encubierto en sus ciudades, violando derechos humanos establecidos en la Constitución Nacional Argentina al restringirlos sin fundamentos legales, pues los gobernadores e intendentes no están legalmente habilitados a cerrar caminos o establecer fronteras, y estarían desobedeciendo a la Constitución Nacional Argentina donde se afirma que los ciudadanos de cada provincia gozan de todos los derechos y privilegios de ciudadanía en las demás, siendo la misma Constitución que además establece que todos los ciudadanos gozan del derecho a transitar por todo el territorio nacional, no pudiéndose realizar restricciones sin fundamento legal ni tampoco normas discriminatorias que impidan el tránsito;
Que la Constitución Nacional Argentina permite restringir la libre circulación únicamente cuando el Presidente solicita al Congreso la declaración del Estado de sitio, lo cual no ha sucedido hasta el momento, demostrando así la ilegalidad e inconstitucionalidad de las actuaciones del gobierno argentino de Alberto Fernández frente a la pandemia del Coronavirus, la cual no amerita de ningún modo arrasar con las protecciones constitucionales y los derechos humanos;
Que una gran cantidad de municipios han declarado sus propios toques de queda con restricciones a la circulación y prohibiciones absolutas de salir de los domicilios luego de un horario determinado, tomando medidas ilegales con total independencia de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial a nivel nacional, y dictaminando medidas que suelen impedir la circulación desde la tarde, lo cual no sólo es una medida ilegal que no surge de ninguna norma sino que incluso ignora que los intendentes no tienen ningún tipo de potestad para desoír garantías constitucionales y dictaminar medidas sanitarias que son incumbencia del gobierno nacional;
Que una gran cantidad de gobiernos provinciales de Argentina tomaron decisiones ilegales y prohibieron el acceso a sus territorios, incluso bloqueando sus accesos y dejando a una gran cantidad de personas atrapadas entre los límites provinciales, como es el caso de un grupo de andinistas que si bien pasaron los chequeos médicos quedaron varados sin alimento e higiene apropiada en una ruta interprovincial luego de que se decidieron estas restricciones inconstitucionales, no pudiendo acceder a la provincia de Catamarca ni tampoco a la provincia de La Rioja, por lo que, al no dejarlos seguir ni tampoco retornar y ni tampoco armar las carpas para protegerse de la pandemia del mosquito del dengue, los gobernantes provinciales no sólo cometieron un abuso de poder sino también un abandono de persona y un tratamiento inhumano que viola las condiciones básicas de vida, formando parte de un plan sistemático que es un crimen de lesa humanidad;
Que decenas de ciudadanos argentinos también quedaron atrapados en un puente entre la frontera de Argentina y Brasil en Puerto Iguazú, no pudiendo ingresar a ninguno de los dos países a pesar de ser ciudadanos, lo cual constituye uno de las decisiones más incomprensibles e inhumanas de la historia del país, dejando a estas personas en un estado de aprisionamiento ilegal e infrahumano sin alimento ni higiene;
Que se concuerda con el exembajador argentino Jorge Asís, quien ha definido al actual gobierno argentino como un Estado Policial incluso aunque parezca tener una buena causa, pues el gobierno argentino ha decidido mantener un estricto control sobre toda la sociedad por medio de la supresión de los derechos fundamentales y las libertades civiles, desplegando todas las fuerzas de seguridad para tales fines en lugar de utilizarlas en combatir el narcotráfico y el crimen organizado, lo cual implica que el gobierno argentino contradice la Constitución Nacional Argentina y las Convenciones de derechos humanos, conformando un Estado Policial antidemocrático y anti-republicano;
Que el grupo de médicos expertos que asesoran al gobierno argentino para continuar con la cuarentena ilegal están formando parte de un plan sistemático y generalizado de violaciones a los derechos humanos, pues se han violado los derechos al trabajo por no permitir que la población pueda salir a ganarse su alimento, se ha violado el derecho a la libertad de movimiento al requerir permisos gubernamentales para aquellos que deseen salir de sus casas, se ha violado el derecho a la educación por suspenderse las clases escolares y universitarias, se ha violado el derecho a la libertad de culto por no permitir el funcionamiento de las iglesias, se ha violado el derecho a la reunión por no permitir que personas amigas se junten en sus casas, se ha violado el derecho a la salud al generar miles de muertes producto de cancelar consultas y procedimientos médicos relacionados con enfermedades cardiovasculares que son la primer causa de muerte en el mundo, se ha violado el derecho al bienestar por no permitir el funcionamiento de la psicología, se ha violado el derecho a la defensa por no permitir el funcionamiento de abogados, y se ha violado el derecho al desarrollo por no permitir el funcionamiento de cientos de miles de empresas cuyo 80% de éstas se encuentran al borde de la bancarrota al no poder pagar los sueldos de sus empleados, todo lo cual es un conjunto de medidas incoherentes y disparatadas en un país en el que antes del Coronavirus ya existía un 40% de pobreza y que ahora se ve frente a un posible estallido social producto de la ignorancia e inoperancia de la corrupta casta política;
Que el gobierno argentino ha realizado durante la Cuarentena un sistema generalizado y sistemático de detenciones arbitrarias por parte de las brutales fuerzas represivas estatales, lo cual es un crimen contra la humanidad, llegándose a la escandalosa cifra de más de 3 millones de personas detenidas o imputadas por la única razón de ejercer sus derechos constitucionales y libertad a la circulación, pero no por la razón de propagar una epidemia, lo que implicaría que en Argentina existen más violadores de cuarentena que enfermos de Coronavirus en todo el mundo;
Que la detención de personas en el marco de la pandemia del Coronavirus únicamente sería una detención legal cuando esté comprobado judicialmente no sólo que la persona está infectada sino también que ha decidido propagar intencionalmente el virus a otras personas;
Que el gobierno argentino ha suspendido ilegalmente los derechos constitucionales de los ciudadanos de forma totalmente irracional para crear un Estado Policial que combate a un virus con una tasa de mortalidad real muy similar a la gripe, pero que al momento de combatir los verdaderos flagelos que atormentan a la población -como el narcotráfico y la delincuencia- el sistema policial no sólo no funciona sino que incluso es cómplice de los delincuentes, mientras los políticos corruptos se hacen cada día más ricos y el pueblo se hace cada día más pobre;
Que el gobierno argentino finge y sobreactúa una supuesta preocupación por la salud del pueblo, utilizando la excusa del Coronavirus para instaurar un régimen inconstitucional, lo cual es demostrable por la posición que se ha mantenido durante décadas en todos los asuntos que atentan gravemente contra la salud, como es el caso del tabaquismo que produce la muerte de más de 120 ciudadanos argentinos por día, lo cual es un número superior a la cantidad actual de muertes por Coronavirus en el país, y sin embargo el gobierno argentino nunca ratificó el Convenio de la OMS para el control del Tabaco ni tampoco promovió medidas eficaces contra este mal global;
Que el régimen ilegal de Argentina liderado por Alberto Fernández y Cristina Kirchner ha detenido o sancionado a millones de civiles inocentes, mientras que al mismo tiempo de forma totalmente irracional ha liberado a genocidas e incluso a miles de presos sin tobilleras electrónicas bajo la excusa de que en prisión pueden contagiarse de Coronavirus;
Que la policía argentina ha detenido ilegalmente a civiles indefensos, incluso mujeres y niños, a los que luego ha asesinado y encubierto el homicidio impunemente, como es el caso de Florencia Morales quien fue detenida por circular en bicicleta y pocas horas después apareció ahorcada en la celda de una comisaría de la región de San Luis, haciéndose creer que se había suicidado con los cordones de sus zapatillas, y además tan sólo unos días después en la misma región de Argentina se detuvo a un niño y unas horas después en la comisaria apareció ahorcado con su propia remera;
Que la policía argentina ha detenido ilegal y violentamente a civiles inocentes por el sólo hecho de caminar por la calle, como fue el caso de Laura Turzanski, quien a pesar de citar artículos constitucionales que le permitían caminar libremente y alegar que una orden presidencial no se encuentra por encima de la Constitución Nacional Argentina, sin embargo fue detenida violentamente y además la policía le manifestó que no hay Constitución porque “estamos en una pandemia”;
Que el artículo 14 de la Constitución Nacional Argentina brinda a todos sus ciudadanos derechos al trabajo, al comercio, a entrar al territorio, al tránsito, a la asociación, al culto y al aprendizaje, todos los cuales han sido violados por el gobierno de facto de Alberto Fernández;
Que el artículo 18 de la Constitución Nacional Argentina manifiesta que ningún ciudadano argentino puede ser penado sin juicio previo ni arrestado sin orden escrita por autoridad competente, siendo inviolables sus derechos constitucionales;
Que el Comité Internacional de Ética Budista coincide con Javier Cremades, Presidente de la World Jurist Association, quien ha manifestado que la cuarentena implica una pérdida de la libertad sagrada del ser humano, siendo casi un arresto domiciliario sin la determinación de un juez, por lo que la pandemia de Coronavirus no puede ser una coartada para que el Poder gubernamental prevalezca sobre los derechos de los ciudadanos, ya que la protección de la salud debe realizarse con medidas conformes a la Constitución y nunca violándola, pues la acción pública siempre debe respetar la dignidad de las personas;
Que las cuarentenas son mecanismos inconstitucionales e ineficientes para proteger la salud de las personas, pues generan crisis económicas y la pérdida de millones de puestos de trabajo, con lo cual millones de personas entran en la pobreza y miseria, teniendo peor alimento y peor salud integral, como es el aumento de muertes por enfermedades cardiovasculares, por desnutrición y por homicidios, por lo que es un acto de ignorancia o irracionalidad absoluta que el Presidente Fernández manifieste que prioriza la salud por sobre la economía, cuando en realidad ambos elementos son interdependientes;
Que la realización de una cuarentena para toda la población -en un país que ya posee un 40% de pobreza- constituye prácticamente un desastre económico y una especie de condena de muerte, por lo que muchos especialistas han afirmado que sería mucho más sensato que únicamente se corten los espectáculos de entretenimiento masivo y que los adultos mayores de 65 años estén en sus domicilios en tanto que constituyen el 93% de los muertos por Coronavirus, lo cual posibilitaría que gran parte de la población pueda regresar al trabajo y a la educación ya que sus vidas no corren peligro, además de que esto no haría que se desborde el sistema sanitario;
Que la realización de una cuarentena únicamente para la población mayor de 65 años no debería ser obligatoria sino una cuarentena optativa, en la que el Estado brindaría recursos y protección a aquellos que deseen recluirse en sus casas, pues de lo contrario se crearía un sistema discriminativo y segregativo que es inconstitucional, además de que una gran cantidad de ancianos preferiría arriesgarse a infectarse y morir antes que vivir de forma inhumana y sedentaria en prisión domiciliaria;
Que los gobiernos del mundo están aprovechando la crisis del Coronavirus para instaurar un régimen autoritario de vigilancia ilegal que vulnera el derecho a la privacidad, comenzando a destruir los principios republicanos y el respeto por los derechos fundamentales y las libertades individuales, pues quien tiene que decidir cómo vivir frente a la pandemia son las personas y no los políticos;
Que el régimen político argentino está volviendo a lo peor del pasado, que fue precisamente cuando las dictaduras militares suspendieron los derechos constitucionales e instauraron un Estado Policial Autoritario de crímenes de lesa humanidad;
Por ello, se DECRETA:
ARTÍCULO 1°.- Apruébese una nueva extensión de la Sentencia contra la Comisión Interamericana de Derechos Humanos con el fin de rectificar su comportamiento y sancionarla éticamente para que cumpla con sus funciones, declarándola Cómplice de Crímenes de lesa humanidad y Altos Crímenes contra las Libertades fundamentales intrínsecas.
ARTÍCULO 2°.- Repruébese a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por no investigar ni promover el juicio contra las violaciones a los derechos humanos que implica el sistema de Cuarentena, especialmente el Caso Argentino y sus detenciones arbitrarias sistemáticas y generalizadas que violan la Constitución Nacional Argentina y la Convención Americana de Derechos Humanos.
ARTÍCULO 3°.- Ordénese al Estado del Vaticano y al Papa Francisco I dejar de acusar imaginariamente de “genocidio virósico” a aquellos países que no promueven cuarentenas, lo cual es una posición que no hace más que contribuir a la verdadera pandemia del miedo y la ignorancia, presionando a los gobiernos para que tomen medidas inconstitucionales como las que ocurrió en Argentina.
ARTÍCULO 4º.- Invítese a la Corte Penal Internacional (ICC) a investigar y juzgar los crímenes contra la humanidad cometidos impunemente por el gobierno argentino de los presidentes Cristina Kirchner, Mauricio Macri y Alberto Fernández.
ARTÍCULO 5°.- Confírmese que aquellos países latinoamericanos que han apoyado las cuarentenas criminales no han hecho más que repetir el sistema de gobierno autoritario y antidemocrático de China que históricamente ha violado los derechos humanos de toda su población.
ARTÍCULO 6°.- Comuníquese apoyo ético y solidario a los ciudadanos de todo el mundo que buscan liberarse de las cuarentenas ilegales y dictatoriales, incitando a que levanten la bandera de la Libertad, Igualdad y Fraternidad para incumplir las leyes inconstitucionales, excesivas, injustas e indignas que violan sus derechos humanos y libertades intrínsecas, lo cual significa la realización de un llamado pacífico y democrático a la Desobediencia Civil Planetaria.
ARTÍCULO 7°.- Recuérdese que la Libertad no sólo es un derecho constitucional sino que también es la naturaleza dhármica o espiritual del ser humano, siendo su Propósito existencial que nunca puede ser abolido ni suspendido por ningún gobierno.
Siempre con espíritu de reconciliación (maitri),
S.E. Maestro Maitreya Samyaksambuddha
Presidente y Juez del Comité Internacional de Ética Budista