Caso n° 29/2017:
WORLD PEACE PRIZE AWARDING COUNCIL
SENTENCIA ÉTICA
Estimados Fiscal, Defensor Público, Embajador y Miembros
del Jurado del Comité Internacional de
Ética Budista (CIEB) y Tribunal
Budista de Derechos Humanos (TBDH), respecto del Caso 29-2017 contra la “WORLD PEACE PRIZE AWARDING COUNCIL”, por medio de la presente, en el día 21 de Agosto de 2017,
se deja constancia de que se ha concluido el juicio del Comité de Ética para
analizar la violación a la Ética Budista y los Derechos Humanos realizada por el
acusado. Este Caso ha sido llevado a cabo como consecuencia del “Caso State Sangha Maha Nayaka Committee”.
Luego del análisis de la presentación del Caso y la
validación de pruebas, se ha procedido con la votación de 5 miembros del Jurado,
confirmándose que hubo 1 voto de “Insanía” y 4 votos de “Responsable” para la “WORLD
PEACE PRIZE AWARDING COUNCIL” por los graves delitos de Complicidad
con Crímenes contra la Paz y Complicidad con Violaciones al Patrimonio
Cultural Budista. No sólo el “WORLD
PEACE PRIZE AWARDING COUNCIL” ha ignorado los reclamos del Tribunal Budista de Derechos Humanos para
anular el Premio de la Paz entregado al Presidente del “State Sangha Maha Nayaka
Committee”, sino que además ha entregado un Premio de la Paz a un
estafador que usurpa ilegítimamente al Patrimonio Cultural Budista, engañando a
muchas personas con la posesión de estatus espiritual con el fin de vender
pinturas a precios enormes. De este modo, ambos Premios de la Paz son espurios
e ilegales, pues mientras un premio otorga aval ético a Bhaddanta Kumarabhivamsa,
que ha participado en crímenes internacionales contra la paz, por otra
parte, también se ha otorgado aval ético a Wan
Ko Yee, que es un estafador que utiliza el alias de "H.H. Dorje Chang Buddha III". De este modo, el Comité Internacional de Ética Budista ha
implementado la jurisprudencia utilizada en el “Caso Asociación UNESCO de Málaga”, el “Caso Yoga Beer”, el Caso “Norwegian
Nobel Committee” y el “Caso UNESCO”,
considerando que ambos premios son Cómplices de crímenes contra la Paz y
Cómplices de violación al Patrimonio Cultural Budista.
Estos actos demuestran que los miembros del “WORLD PEACE PRIZE AWARDING COUNCIL” no
están practicando la Paz Recta y Adecuada
(Samma-Santi). Aunque probablemente en el pasado han entregado premios a
personas que merecen este reconocimiento, las evidencias son muy claras con
respecto a la ilegalidad de los Premios de la Paz entregados a Bhaddanta Kumarabhivamsa y Wan Ko Yee (“H.H. Dorje Chang Buddha III”).
Ambas premiaciones son desastrosas, porque avalan actos criminales como el
Genocidio y la Estafa, siendo ambas situaciones violaciones al Derecho
Internacional y también al Derecho Budista. Así, los miembros del “WORLD PEACE PRIZE AWARDING COUNCIL” han
olvidado su deber supremo para la defensa de la paz, avalando éticamente a
criminales que utilizan este reconocimiento para seguir perpetrando sus
crímenes.
Por lo tanto, la Comunidad Maitriyana le ofrece al “WORLD PEACE PRIZE AWARDING COUNCIL” esta
Sentencia Ética como modo de enseñanza sobre la Paz Recta y Adecuada (Samma-Santi), para que esta organización
internacional abandone rápidamente su comportamiento inmoral. Si la “WORLD PEACE PRIZE AWARDING COUNCIL”
aprende rápidamente de esta Sentencia Ética y anula los Premios de la Paz
entregados a Bhaddanta Kumarabhivamsa
y Wan Ko Yee (“H.H. Dorje Chang Buddha
III”), entonces el Comité
Internacional de Ética Budista considerará que se ha llegado a un acuerdo reconciliatorio post-sentencia,
y entonces se anularán los cargos tras haberse cumplido el Propósito del
Derecho Budista: el aprendizaje del bien y la rectificación del mal
comportamiento. Incluso, si en el futuro existiese esta posible rectificación o
purificación por parte del “WORLD PEACE PRIZE AWARDING COUNCIL”,
entonces el Comité Internacional de
Ética Budista también podría llegar a ofrecer guía ética incondicional para
la elección de futuros recipientes de Premios a la Paz. Debido a que en el año
2003 el “WORLD PEACE PRIZE AWARDING
COUNCIL” ha reconocido a Gandhi con un Premio de la Paz, algo que incluso
el Norwegian Nobel Committee falló en
realizar, el Comité Internacional de
Ética Budista espera que en el futuro recuperen esta visión sobre la Paz
Adecuada (Samma-Santi), recordando siempre que es mejor honrar a los guías del
pasado que honrar a los criminales del presente.
A pesar de que Gandhi tuvo fallas éticas en su vida
personal y en su visión de la justicia social en India, el Maitriyana lo
reconoce como un gran seguidor y practicante del Camino de Paz (Santi-marga)
creado por Gautama, enseñando que sólo el poder de la purificación ética, la
Verdad y el Amor Espiritual pueden triunfar el mundo interno y externo frente a
los conflictos de la vida. Por ello, los Seres Libres e Iluminados
(Arhats-Bodhisattvas) tienen la capacidad de autosacrificarse por el bien de
todos los seres.
El Derecho Budista se rige por la idea de crear una
comunidad global basada en los valores esenciales de la paz mundial, la
justicia social, la educación avanzada y la salud ambiental. Este Camino de
vida ayuda a resguardar lo más importante de la historia de la humanidad. Sin
embargo, esto requiere el compromiso de actuar en concordancia con las
enseñanzas de los grandes maestros espirituales y activistas sociales, como
Gautama y Gandhi, quienes han definido claramente la cuestión de la Paz para
que nunca esté distorsionada. Aunque la civilización capitalista y la Organización de las Naciones Unidas
ciertamente han fallado en la misión de crear una comunidad internacional de
paz, el Maitriyana confirma que el liderazgo ético real y eficiente nunca
provendrá de los gobiernos, sino que más bien provendrá de las tradiciones
culturales originarias, como los Pueblos Tribales y las Comunidades
Espirituales, que durante miles de años han contribuido a un mundo pacífico,
justo, sabio y compasivo. Estos Pueblos y Comunidades mayormente continúan
existiendo de forma independiente de los poderes de turno, por lo que tienden a
ser menos corrompidas. En efecto, cuando los Pueblos Tribales y las Comunidades
Espirituales no proveen una crítica ética a los poderes políticos, entonces
aumenta la probabilidad de corrupción y beneficio para unos pocos. Como los
líderes políticos no pueden satisfacer los requerimientos de un liderazgo ético
para la humanidad, entonces esta tarea vacante debe ser cubierta por aquellos
que están empoderados por la Verdad y la Libertad, convocando a todas las
naciones a unirse en un proyecto mayor de vida que obliga a solucionar los
problemas del mundo en el presente y simultáneamente a tener clara la meta de
evolución en el horizonte. Por lo tanto, el Derecho Budista defiende la idea
del derecho humano a la paz, pero por sobre todo defiende el supremo derecho humano a la evolución,
cuyo motor histórico ha sido la libertad, igualdad y fraternidad.
En conclusión, el Comité
Internacional de Ética Budista tiene el Propósito (Dharma) de guiar a la
comunidad internacional por medio de la Paz Verdadera, lo cual implica una
crítica directa a las organizaciones que apoyen una visión distorsionada de la
Paz. Por lo tanto, se establece que la “WORLD
PEACE PRIZE AWARDING COUNCIL” está violando al derecho humano a la paz al
avalar o premiar éticamente a sujetos que cometen delitos, especialmente premiando
a sujetos que violan al Derecho Budista. Indudablemente, los Premios de Paz
deben ir dirigidos hacia personas y organizaciones que son merecedoras de tal
honor, y nunca deben ser dirigidos a aquellos que cometen delitos y atacan a la
Paz. La Paz Mundial es un Propósito Supremo (Dharma) que nunca debe estar
asociado con criminales, pues de lo contrario la humanidad perdería la fe en un
mundo mejor. Únicamente practicando el Camino de la Paz Verdadera, tal y como
lo practicaron muchos activistas sociales de la historia, las organizaciones podrán
reconocer adecuadamente a aquellos que son merecedores de Premios a la Paz. De
esta manera, el Caso sobre la “WORLD
PEACE PRIZE AWARDING COUNCIL” constituye una gran enseñanza para que predomine
la solidaridad y Verdad, en lugar de que predomine la injusticia y el engaño
que oprimen la dignidad intrínseca del ser humano.
Siguiendo el Camino del Maestro Gautama, quien desarrolló
un Camino de Paz Recta y Adecuada
(Samma-santi-marga) a nivel mundial, el Comité Internacional de Ética Budista supervisa que las organizaciones
nacionales e internacionales sean rectas, justas y éticas, nunca traicionando el
compromiso con la Paz Mundial, por lo que se ha sentenciado a la “WORLD PEACE PRIZE AWARDING COUNCIL” como
“Responsable” de Complicidad
con Crímenes contra la Paz y Complicidad con Violaciones al Patrimonio
Cultural Budista.
Con espíritu de reconciliación (maitri),
Maestro Maitreya Samyaksambuddha
Presidente y Juez Espiritual del Comité Internacional de Ética Budista (CIEB) y Tribunal Budista de Derechos Humanos (TBDH)
No hay comentarios:
Publicar un comentario