Justicia Verdadera

Justicia Verdadera

domingo, 31 de diciembre de 2017

Sentencia sobre "Ven. Lama Lobzang"


Caso n° 37/2017: Ven. Lama Lobzang

SENTENCIA ÉTICA
Estimados Fiscal, Defensor Público, Embajador, Secretario y Miembros del Jurado del Comité Internacional de Ética Budista (CIEB) y Tribunal Budista de Derechos Humanos (TBDH), respecto del Caso 37-2017 contra Ven. Lama Lobzang, por medio de la presente, en el día 30 de Diciembre de 2017, se deja constancia de que se ha concluido el juicio del Comité de Ética para analizar la Violación a la Ética Budista realizada por el acusado.
Luego del análisis de la presentación del Caso y la validación de pruebas, se ha procedido con la votación de 8 miembros del Jurado, confirmándose que hubo 1 voto de “Insania”, 1 voto de “Inocente” y 6 votos de “Responsable” para el Ven. Lama Lobzangpor el grave delito de Violación al Derecho Budista. Al interpretar y dar voz a la votación de los miembros del Jurado, se concluye que Ven. Lama Lobzang no tiene ningún tipo de excusa para cometer Violación al Derecho Budista, pues incluso si la Sangha de la International Buddhist Confederation (IBC) llegase a estar regulada por el gobierno de la India esto no exculparía a Ven. Lama Lobzang por mantener a un criminal genocida como Patrono Espiritual dentro de la organización, y precisamente esta situación no lo exculparía porque permitir dicha intrusión gubernamental sería en sí misma una nueva Violación al Derecho Budista. En este sentido, la defensa esgrimida por el Defensor Público, incluso sin saberlo, es prueba y aceptación de los cargos por los que se acusa a Ven. Lama Lobzang, justificándose una Violación por medio de otra Violación contra la Ética. De este modo, esta Sentencia enseña a Ven. Lama Lobzang que debe cumplir no sólo con los preceptos éticos de la Espiritualidad Budista, sino también con la jurisprudencia establecida por el Comité Internacional de Ética Budista.  Las evidencias del Caso han demostrado que Ven. Lama Lobzang se encuentra dentro del marco de la ilegalidad tras incumplir las sentencias, notificaciones, requerimientos, resoluciones y proclamaciones emitidos por el Comité Internacional de Ética Budista. Sin embargo, si Ven. Lama Lobzang llegase eventualmente a solicitar disculpas públicas y remediar el daño causado, expulsando al Dr. Bhaddanta Kumarabhivamsa (presidente del State Sangha Maha Nayaka Committee del gobierno de Myanmar) como Patrono del International Buddhist Confederation (IBC), entonces se habría llegado a un acuerdo reconciliatorio post-sentencia, pudiéndose eventualmente anularse todos los cargos contra el acusado. Hasta que esto no suceda, el Comité Internacional de Ética Budista declara que Ven. Lama Lobzang es Responsable de Violación al Derecho Budista.
Por otra parte, se deja constancia de que las causas de este mal comportamiento de Ven. Lama Lobzang no sólo son haber ignorado las recientes Sentencias del Comité Internacional de Ética Budista, sino también haber incumplido con el inspirador mensaje de la World Association of Buddhism emitido el 25 de Julio de 2013, cuando se escribió a Ven. Lama Lobzangy al International Buddhist Confederation (IBC) que “por favor recuerden siempre practicar el Desapego, ser pobres en lo exterior y ricos en lo interior; la meta más Noble de la Espiritualidad Budista debe ser traer Iluminación a todos los pueblos del mundo. Dos de los Mandamientos del Maitriyana son: Sólo la Espiritualidad puede salvar el mundo, guiando a los pueblos hacia el Despertar y la Liberación del materialismo, y, El Desarrollo tecnológico no es la Evolución Real. La Verdadera Evolución de la Humanidad puede únicamente proceder a través de la Evolución Espiritual de la consciencia, transformando la mente y la sociedad a través del pacifismo, la justicia social, la sabiduría y la ecología. Estos son los cuatro pilares de la Cura para las enfermedades del mundo que son la guerra, la pobreza, la ignorancia y la contaminación.” Por no haber aprendido el arte de la humildad y el desapego, que es mantener una mente pura y correcta, Ven. Lama Lobzang ha decidido no cumplir los lineamientos básicos del Derecho Budista, dejándose de comportar como un Maestro para en cambio encarnar la función de un político.
Luego de 2600 años del singular sistema de civilización del Pueblo Budista, el Maitriyana adquiere significancia histórica al desarrollar el Derecho Budista Internacional como una teoría y práctica ética que evoluciona plenamente los cánones legales del pasado. La dirección fundamental del vehículo del Maitriyana es realizar en el aquí y ahora lo que se denomina como Budismo Supremo o Budismo del Futuro. Por medio de la sagacidad única de la contemplación activa, la sabiduría compasiva y la ética humanitaria, el Derecho Budista Internacional se posiciona como un gran movimiento contracultural de liderazgo espiritual, corrigiendo y guiando a la humanidad hacia el esplendor de un mundo mejor. Al analizar la historia de las comunidades espirituales (Sanghas) el Maitriyana acontece como el movimiento que más defiende la rectitud, conteniendo los preceptos más altos para llegar a la Paz, Justicia, Verdad y Cura, dado que se conservan y honran los conocimientos cumbres de todos los principales Seres Despiertos (Buddhas) de la historia. En efecto, el desarrollo progresivo de este Budismo Supremo ha conducido a la creación de la Convención Budista de Derechos Humanos en el marco del Octavo Concilio Budista llevado a cabo por la United Buddhist Nations Organization, la cual se distingue totalmente con respecto a cualquier Sangha internacional, especialmente en comparación con el International Buddhist Confederation (IBC), demostrando totalmente que incluso sin dinero y sin apoyo gubernamental se pueden realizar los proyectos más extraordinarios y revolucionarios del Derecho Budista Internacional. Precisamente, esta independencia y autonomía de la Comunidad Maitriyana en relación a los Estados hace que tenga una gran legitimidad ética, realizando un estilo de enseñanza que emana humildad y genuinidad en cada acto y palabra. Sin embargo, el Derecho Budista Internacional no apunta a simplemente preservar la pureza de la Comuna Espiritual (Sangha) por medio de reglas internas, sino que también busca construir una Tierra Pura o Reino de Rectitud en el mundo, lo cual conlleva crear una doctrina y práctica ética superior. Esta contribución aporta política pacifista, economía socialmente justa, cultura avanzada gratuita y salud ecológica. Así, el Maitriyana enseña que el Budismo Supremo es importante y determinante para la supervivencia y la evolución de toda la humanidad, pues de lo contrario la civilización desaparecerá por los males de la guerra, la injusticia, la ignorancia y la contaminación. En definitiva, el Derecho Budista Internacional sigue el Propósito (Dharma) de los Seres Libres e Iluminados (Arhats-Bodhisattvas) de luchar por la Salvación de todos los seres, ya que en cada ser sintiente reside potencialmente una naturaleza dhármica que desea ser desocultada o liberada. Por ello, el Maitriyana no sólo muestra misericordia absoluta hacia todos los seres humanos, como el Pueblo Rohingya víctima de exterminio por parte del gobierno de Myanmar, sino también tiene misericordia hacia los seres no-humanos, enseñando que la búsqueda de la liberación individual no es más que una vía limitada y falsa mientras no esté acompañada por la búsqueda de la liberación colectiva. En este sentido, el Derecho Budista Internacional considera que realizar críticas y juicios contra la injusticia y la impunidad es una forma de contribuir al Despertar (Bodhi) de los demás, enseñando que la Atención Plena, el Conocimiento Cumbre y la Rectitud son esenciales para una vida libre e iluminada.
El Maitriyana es una forma de percibir la existencia desde la perspectiva del Budismo Supremo, por lo que utiliza la lógica dialéctica paradojal para superar y evanescer todo tipo de contradicciones o dualismos entre las distintas tradiciones espirituales. En concordancia con el análisis del Nirvana Sutra realizado por el Maestro Wonhyo, el Budismo Supremo o Perenne sintetiza todas las enseñanzas de los Sutras, reuniendo y reconciliando todas las corrientes en una sola, que es el verdadero significado no-dualista de la enseñanza de los Seres Despiertos (Buddhas). La reconciliación de controversias doctrinales y armonización de distintas expresiones (hwajaeng hoet´ong) o la reconciliación de interpretaciones distintas (hwajaeng) no es una idea creada por el Maestro Wonhyo, sino que es la manera de desarrollar el método de lógica dialéctica paradojal para poder tener entendimiento correcto y descifrar el verdadero Sentido de la Espiritualidad. Este Sincretismo y armonización (hwahoe) es el procedimiento más claro, racional y veraz en el Propósito metodológico de entender la Vía Única (Ekayana) del Maestro Gautama. La idea de reconciliar y armonizar diferentes interpretaciones y enseñanzas de la Espiritualidad dentro de una gran unidad no es un mero objetivo teórico del Budismo Supremo o Perenne, sino más bien es una metodología pragmática, pues la intención de este sincretismo es iluminar el verdadero Propósito (Dharma) de las enseñanzas del Maestro Gautama, especialmente recalcando en que se debe enseñar a las personas a no venerar a un Ser Despierto (Buddha), y que en cambio se les debe enseñar cómo convertirse en un Ser Despierto (Buddha). De esta manera, la tarea del Derecho Budista Internacional es una guía clave e histórica, pues sin ética y rectitud no hay ningún tipo de Despertar (Bodhi) del Ser Verdadero ni Cura (Nirvana) del sufrimiento. Esto diferencia al Maitriyana con respecto a todas las religiones y filosofías, estableciendo su objetivo práctico en la transformación espiritual de la humanidad y no en la veneración de ídolos o en el aprendizaje de meras ideas, afirmando que el Budismo Supremo requiere la unificación de las tres vías de la Contemplación Activa, la Sabiduría Compasiva y la Ética Humanitaria para poder liderar a todos los seres hacia su naturaleza dhármica o dignidad intrínseca. No es exagerado afirmar que el Derecho Budista Internacional se posiciona como líder ético mundial cuando supervisa que todas las comunidades espirituales (sanghas) no violen sus preceptos internos y también cuando se supervisa que todos los Estados no violen los derechos humanos. El Maitriyana defiende la vida sabia y compasiva con pasión profunda y compromiso inquebrantable, por lo que su significación histórica es innegable, sólo pudiendo ser ignorada por una cultura ignorante y opresiva. De hecho, el Derecho Budista Internacional no sólo investiga y enjuicia a aquellos que hacen el mal, sino que también es un movimiento que trabaja para hacer el bien y purificar espiritualmente a toda la humanidad, proclamando que se debe inaugurar una Civilización Dhármica con características socialistas libertarias, lo cual implica una trascendencia dialéctica de los polos del capitalismo salvaje y comunismo dictatorial. En concordancia con la tercera civilización y la política del Camino Medio del Maestro Ikeda, el Maitriyana propone el Socialismo Dhármico y el Derecho Budista Internacional como herramientas políticas y jurídicas para construir una nueva civilización con bases espirituales, solidarias y altruistas, demostrando la superioridad que posee la Ley Mística con respecto a la Ley Estatal e Interestatal, y eligiendo los mejores elementos de ambas. El Maitriyana es la fuerza espiritual más poderosa del mundo, siendo la doctrina y práctica más acorde y armónica con la naturaleza dhármica del ser humano, en tanto que el Derecho Budista Internacional es un instrumento para cumplir ese objetivo universal de armonía, bienestar, autorrealización y autotrascendencia. Aunque no se intente crear una sociedad perfecta, que no sería más que una ilusión metafísica, el Maitriyana ciertamente busca crear una sociedad sana y despierta, lo cual es una posibilidad real y totalmente demostrable por las Comunas Espirituales (Sanghas) en el aquí y ahora. Pero para que existan sociedades libres e iluminadas indudablemente se requiere que sean comunidades atentas, sabias y compasivas, teniendo la ética y el altruismo como faro vital. Sin estas buenas prácticas las comunidades y sociedades se pervierten, hundiéndose en la codicia, la violencia y el engaño. Por ello, el Derecho Budista Internacional no puede tolerar que existan comunidades espirituales (sanghas) que incumplan con su función de ser modelos de comportamiento ejemplar, dado que estarían contribuyendo a los males que se suponen que deben evanescer. Por medio de la no-violencia y la ley el Maitriyana confronta con la civilización materialista contemporánea que está obsesionada patológicamente con el desarrollo tecnológico y científico. Así, los Seres Libres e Iluminados (Arhats-Bodhisattvas) guían a la humanidad hacia la construcción de una civilización espiritual en el presente. Efectivamente, las comunidades espirituales (sanghas) son las semillas de esa civilización socialista libertaria del futuro, por lo que estas comunidades tan especiales merecen ser protegidas, no debiéndose permitir que sean contaminadas por elementos insalubres e ilegales. Indudablemente, es importante que las comunidades espirituales (sanghas) practiquen la contemplación y la sabiduría, pero maestros espirituales como Gautama han enseñado que sin ética toda comunidad está condenada a autodestruirse. La civilización materialista está actualmente destruyendo a la humanidad y a la naturaleza por medio de la guerra, la pobreza, la ignorancia y la contaminación, por lo que es fundamental que el Derecho Budista Internacional asegure la supervivencia del mundo y guíe a los pueblos hacia la Cura (Nirvana) del sufrimiento psíquico y social. La humanidad está dormida y enferma, por lo que necesita que los maestros espirituales muestren la vía hacia el Despertar (Bodhi) y la Cura (Nirvana), enseñando la revolución adecuada en el mundo interno y externo, en lugar de contribuir con el status quo de violación sistemática y generalizada a los derechos humanos. El Maitriyana establece iluminativamente que fuera de la Ética no hay Verdad ni Propósito (Dharma).
En conclusión, el Comité Internacional de Ética Budista tiene el Propósito (Dharma) de que la Espiritualidad Budista se mantenga pura y nunca esté pervertida o infiltrada por corruptos, asesinos, violadores, torturadores y genocidas, debiéndose denunciar y expulsar a todo aquél que cometa tales delitos graves e impunes. Por lo tanto, se establece que Ven. Lama Lobzang está violando al Derecho Budista por medio de la revalidación de la figura del Dr. Bhaddanta Kumarabhivamsa (Presidente del State Sangha Maha Nayaka Committee de Myanmar), quien es Responsable de participar en actos de Genocidio y Crímenes contra la Humanidad entre otros varios delitos graves. Indudablemente, cada comuna espiritual (Sangha) tiene derecho a decidir quiénes son sus miembros y Patronos, pero simultáneamente tienen el deber de no violar al Derecho Budista y los preceptos éticos. De esta manera, el Caso sobre Ven. Lama Lobzang constituye una gran enseñanza para que el International Buddhist Confederation (IBC) no apoye a criminales y se mantenga libre e independiente del control gubernamental, pues tal y como ha sucedido con el State Sangha Maha Nayaka Committee del gobierno genocida de Myanmar, cuando se produce control gubernamental sobre la comuna espiritual (Sangha) siempre se pervierte y destruye la pureza y dignidad de la Espiritualidad por medio de Violaciones al Derecho Budista.
Siguiendo el Camino del Maestro Gautama Buddha, quien hace dos mil seiscientos años creó y desarrolló una ejemplar comuna espiritual (Sangha) que resolvía inmediatamente todo tipo de violaciones a la rectitud, el Comité Internacional de Ética Budista supervisa que las comunidades espiritual (Sanghas) de todo el mundo no ataquen ni traicionen a la pureza de la Espiritualidad, por lo que se ha sentenciado a Ven. Lama Lobzang como Responsable de VIOLACIÓN AL DERECHO BUDISTA.
Con espíritu de reconciliación (maitri),
Maestro Maitreya Samyaksambuddha
Presidente y Juez Espiritual del Comité Internacional de Ética Budista (CIEB) y Tribunal Budista de Derechos Humanos (TBDH)


jueves, 28 de diciembre de 2017

Resolución sobre Demonización del Prójimo

Caso nº36-2017: Catholic Archdiocese of Yangon (Myanmar) & His Eminence Cardinal Charles Maung Bo

Resolución sobre Demonización del Prójimo

Viernes 22 de Diciembre de 2017
El Comité Internacional de Ética Budista y Tribunal Budista de Derechos Humanos,
Recordando los principios del Derecho Budista y el Derecho Internacional de los Derechos Humanos, como la Declaración Universal de Derechos Humanos adoptada por la ONU y la Convención Budista de Derechos Humanos adoptada por la United Buddhist Nations Organization;
Considerando que el Estado de Myanmar junto con sus líderes de facto Aung San Suu Kyi y Ming Aung Hlaing han sido sentenciados Responsables por los graves delitos de Genocidio, Limpieza Étnica, Crímenes contra la Humanidad, Altos Crímenes contra la Paz Mundial, Violación al Derecho Internacional de los Derechos Humanos y Violación al Derecho Budista;
Consciente de que el State Sangha Maha Nayaka Committee de Myanmar ha sido sentenciado Responsable por los graves delitos de Complicidad con Genocidio y Limpieza Étnica, Crímenes contra la humanidad y la paz, Violación a los Derechos de los pueblos indígenas y tribales, Violación a la Libertad de expresión, Violación a los derechos de la mujer y del niño, Complicidad con discriminación, Opresión y Detención ilegal contra la Sangha Budista, Falso Budismo y Violación al Código Legal Budista;
Preocupado enormemente por el apoyo público total que en reiteradas ocasiones ha manifestado el Cardenal Charles Maung Bo y la Arquidiócesis Católica de Yangon hacia la líder de facto Aung San Suu Kyi, a pesar de que la misma se encuentra perpetrando crímenes de lesa humanidad;
Deplorando la visita de Su Eminencia Papa Francisco I al Estado de Myanmar, mostrando apoyo público a los líderes genocidas Aung San Suu Kyi y Ming Aung Hlaing, visitando al State Sangha Maha Nayaka Committee e incluso aceptando hacer un acto de negacionismo con respecto a la identidad o existencia del Pueblo Rohingya;
Tomando en consideración que durante la visita de Su Eminencia Papa Francisco I al Estado de Myanmar en Noviembre de 2017 continuaron las expulsiones forzadas de miembros del Pueblo Rohingya, lo cual suma un monto de 650 mil personas en el año, conformando una de las peores crisis de refugiados en la historia de la humanidad;
Examinando que según la prestigiosa organización Médicos Sin Fronteras (MSF) durante el mes previo a la visita de Su Eminencia Papa Francisco I al Estado de Myanmar se produjeron el asesinato o ejecuciones extraoficiales de 6700 individuos del Pueblo Rohingya, muchos de ellos bebés o niñas, lo cual permitiría extrapolar que en cada día de visita del Papa Francisco I a Myanmar este gobierno asesinó diariamente a 220 personas del Pueblo Rohingya;
Reafirmando la Sentencia del 27 de Noviembre de 2017 contra el Cardenal Charles Maung Bo y la Arquidiócesis Católica de Yangon, donde se establece la noción de que la visita de Su Eminencia Papa Francisco I al Estado de Myanmar en el contexto de un plan sistemático y generalizado de exterminio contra el Pueblo Rohingya constituye uno de los mayores escándalos en la historia del Cristianismo, siendo tan grave como el hipotético escenario en que el Papa Pio XII hubiese legitimado al Nazismo visitando Auschwitz durante la solución final o plan de exterminio nazi contra el Pueblo Judío;
Mostrando consternación por el hecho de que el gobierno genocida de Myanmar ha comenzado a perseguir a periodistas que están difundiendo noticias sobre el genocidio, la limpieza étnica y los crímenes contra la humanidad perpetrados por el gobierno contra civiles inocentes, lo cual ha llevado a que la organización Fortify Rights y Antonio Guterres Secretario General de la ONU decidan denunciar públicamente este ataque contra la libertad de prensa, solicitando la inmediata liberación de los periodistas detenidos ilegalmente;
Denunciando públicamente el apoyo de los gobiernos del Vaticano y China hacia el Estado genocida de Myanmar, considerando que ambos han impedido directa e indirectamente que Myanmar sea juzgado por el International Criminal Court (ICC);
Repudiando que el Papa Francisco I recientemente ha afirmado que el Diablo es una persona educada y muy inteligente con nombre y apellido, lo cual no sólo es una idea delirante sino que también es una idea ilegal que viola los derechos humanos y las libertades fundamentales, siendo una herramienta peligrosa porque legitimaría absolutamente la violencia contra cualquier posible persona a la que se difamaría con el rótulo de Diablo sólo por ser alguien contrario a los intereses políticos y económicos del Vaticano;
Notando que el Papa Francisco I tiene precedentes de la utilización del recurso de demonización del prójimo, como cuando declaró que detrás de la oposición a sus reformas se encontraba la participación del Diablo, así como también cuando declaró que la Ley del Matrimonio homosexual en Argentina era una movida del demonio para destruir el plan de Dios, llegando incluso a pedir iniciar una Guerra Santa contra la aprobación de esta ley;
Rememorando la Declaración Universal sobre los Derechos de los Pueblos Budistas y Comunidades Espirituales, donde se afirma que todo ser humano tiene el mismo valor espiritual, por lo que toda doctrina o práctica que manifiesta la superioridad de determinados individuos por sobre otros aduciendo razones de origen nacional, geográfica, racial, étnica o cultural constituye una expresión filosóficamente racista, científicamente falsa, jurídicamente ilegal, éticamente criticable y socialmente injusta;
1.      Establece solemnemente que el Budismo siempre criticará toda práctica violenta que atente contra la vida y sacralidad de todos los seres humanos.
2.      Expresa que las enseñanzas del Maestro Jesús de Nazaret conducen al amor compasivo hacia los demás, y nunca hacia la demonización del prójimo.
3.      Deplora como ilegal la idea de que un ser humano pueda ser el Diablo, siendo un concepto que ha sido utilizado históricamente para cometer persecuciones, asesinatos e incluso Guerras Santas.
4.      Declara que los actos de genocidio, limpieza étnica y crímenes contra la humanidad llevados a cabo por Myanmar contra el Pueblo Rohingya son precisamente frutos de un proceso de demonización contra esta comunidad marginal, siendo el mismo proceso de demonización del prójimo que se realizó en Alemania contra el Pueblo Judío.
5.      Corrige las falsas ideas del Papa Francisco I, quien considera que los miles de abusos de niños cometidos por sacerdotes católicos son realmente una obra del Diablo, lo cual implica no sólo transmitir ideas engañosas sino también no asumir la responsabilidad ante los terribles crímenes causados por la Iglesia, además de ocultar el hecho de que él mismo ha participado activamente en la defensa del pedófilo sacerdote Julio César Grassi, tal y como se ha podido comprobar durante el Caso Tribunal Eclesiástico Nacional sentenciado por los delitos de Violación al Derecho Humano a la Justicia, Fraude Espiritual y Falso Cristianismo.
6.      Apela a todos los miembros del Catolicismo a no seguir nunca la vía que conduce a la Demonización del prójimo, pues el Diablo no existe, siendo únicamente una superstición y una figura simbólica creada por la humanidad, tal y como respectivamente han enseñado el teólogo Vito Mancuso y el sacerdote Arturo Sosa de la Congregación General de la Compañía de Jesús.
7.      Confirma que la única fuente del Mal en el mundo no es una persona ni una entidad metafísica, sino que es el apego, la aversión y la inconsciencia, es decir, la codicia, el odio y el engaño, que son los tres venenos de la mente y el corazón, lo cual únicamente puede ser curado y evanescido por medio del antídoto del Desapego, la Compasión y la Sabiduría.
Siempre con espíritu reconciliador (maitri),
S.E. Maestro Maitreya Samyaksambuddha

Juez y Presidente del Tribunal Budista de Derechos Humanos


martes, 12 de diciembre de 2017

Fallo sobre Dictadura Cívico-Militar de Myanmar

Caso 02-2015: Myanmar

Fallo sobre Dictadura Cívico-Militar de Myanmar

11 de Diciembre de 2017
A raíz de un reciente reporte militar de Myanmar, absurdamente exonerándose a sí misma y negando las atrocidades masivas cometidas contra el Pueblo Rohingya, el Tribunal Budista de Derechos Humanos emite el siguiente Fallo independiente y neutral donde se renueva la condena al gobierno cívico-militar de Myanmar por los cargos de Genocidio, Limpieza Étnica, Crímenes contra la humanidad y Altos Crímenes contra la Paz. Este Fallo es necesario a partir del reciente empeoramiento de las circunstancias en las que se encuentra el Pueblo Rohingya, que ha sido sometido a asesinatos y abusos sexuales masivos organizados por parte del gobierno, especialmente contra mujeres y niños, creando unas condiciones de vida que recientemente obligaron a más de 600.000 personas a huir desesperadamente hacia Bangladesh, donde tampoco son bienvenidos. Para los líderes de facto Aung San Suu Kyi y Min Aung Hlaing, Myanmar sólo se encuentra combatiendo a terroristas y estas muertes no son de personas inocentes, llegando a considerar que el genocidio, la limpieza étnica y los crímenes contra la humanidad denunciados por organizaciones internacionales no son más que fake news.
El Tribunal Budista de Derechos Humanos coincide con la organización Amnistía Internacional en que los militares apoyados por el gobierno entran sistemáticamente a barrios del Pueblo Rohingya donde ejecutan ilegalmente a los hombres y niños, violan a las niñas y mujeres, y luego incendian todas las casas con ancianos y bebés adentro, repitiendo este patrón en muchísimas zonas de Myanmar. Estos asesinatos y masacres que han aniquilado miles de personas, en su mayoría menores de edad, acompañados de torturas y abusos sexuales sistemáticos y generalizados con la finalidad de traumatizar, exterminar y expulsar al Pueblo Rohingya, constituyen pruebas irrefutables de crímenes contra la humanidad, violando al Estatuto de Roma del International Criminal Court.
El Tribunal Budista de Derechos Humanos critica a la dictadura cívico-militar de Aung San Suu Kyi y Min Aung Hlaing por haber realizado un verdadero golpe de Estado en contra de los derechos constitucionales del Pueblo de Myanmar, en lugar de respetar su voluntad soberana y democrática. Esta alianza autoritaria, dictatorial y criminal por parte de Aung San Suu Kyi y Min Aung Hlaing, apoyada incluso por el Vaticano, ha tenido terribles consecuencias, pues no sólo ha mantenido leyes que restringen la libertad de expresión y que mantienen encarcelados a prisioneros políticos, sino que además juntos han complotado en brindar total impunidad a graves violaciones al Derecho Internacional de los Derechos Humanos como asesinatos en masa, lo cual incluso ha sido criticado por Katina Adams del Departamento de Estado de USA. En este sentido, congresistas de Estados Unidos como el republicano Steve Chabot y el demócrata Joseph Crowley han intentado que se realicen sanciones económicas contra el régimen militar de Myanmar, intentando enviar un mensaje claro de que no hay excusa para deportaciones crueles y extensas de civiles, aunque indudablemente es muy difícil emitir sanciones económicas a un país que durante un genocidio recibe el apoyo papal de la Santa Sede. En una postura totalmente opuesta a dicha complicidad, organizaciones como el United States Holocaust Memorial Museum y Fortify Rights han denunciado públicamente el genocidio que ocurre en Myanmar contra el Pueblo Rohingya.
El Tribunal Budista de Derechos Humanos recuerda que Myanmar fue antiguamente un país miembro de la Civilización Budista, por lo que el sistema de Derecho Budista aún tiene una enorme importancia política y cultural en este país. De esta manera, se confirma que la dictadura cívico-militar de Myanmar, por medio de un constante comportamiento genocida que ha sido descrito como limpieza étnica por Zeid Ra’ad al-Hussein Alto Comisionado de Derechos Humanos en la ONU y por el Secretario Rex Tillerson de USA, ha estado violando todos los principios éticos y humanitarios del Derecho Budista. Al mismo tiempo, Pramila Patten, representante especial de la ONU sobre violencia sexual en conflicto, recientemente ha manifestado la misma posición que el Tribunal Budista de Derechos Humanos tiene desde su creación en 2015, denunciando que el ejército de Myanmar deberá ser juzgado ante el International Criminal Court (ICC) por utilizar al abuso sexual como un acto y arma de genocidio, además de emplear la tortura y el incendio de casas como herramientas de persecución contra niños y mujeres para que abandonen forzosamente el país. Esta solicitud pública para que Myanmar sea juzgada ante el International Criminal Court (ICC) también ha sido impulsada por la Burmese Rohingya Organisation, la cual adicionalmente ha requerido sanciones económicas de la ONU. No sólo la organización Human Rights Watch ha coincidido con que se debe poner fin a la impunidad de los crímenes cometidos por el ejército de Myanmar de forma sistemática y generalizada, sino que incluso el mismo Presidente Trump ha afirmado que las brutales atrocidades cometidas requieren rendición de cuentas.
El Tribunal Budista de Derechos Humanos, por tener la obligación moral de defender los derechos naturales de todos los seres sintientes y nunca tolerar la injusticia, falla que los líderes de facto de Myanmar, Aung San Suu Kyi y Min Aung Hlaing, son Responsables no sólo de Genocidio, Limpieza Étnica, Crímenes contra la humanidad y Altos Crímenes contra la Paz, sino también de VIOLACIÓN AL DERECHO INTERNACIONAL de DERECHOS HUMANOS y VIOLACIÓN AL DERECHO BUDISTA.

Siempre con espíritu de reconciliación (maitri),
Maestro Maitreya Samyaksambuddha
Presidente y Juez del Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos




sábado, 9 de diciembre de 2017

Resolución sobre Comunidad Mapuche

Caso n° 27/2017: Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)

RESOLUCIÓN sobre Comunidad Mapuche

El Tribunal Budista de Derechos Humanos,
Confirma que Santiago Maldonado, miembro del grupo mapuche RAM, falleció en el contexto de una represión violenta de organismos del Estado Argentino contra pueblos tribales que luchan por la recuperación de sus tierras originarias;
Confirma que la orden de reprimir violentamente a este grupo mapuche se originó desde las más altas esferas del Estado Argentino, como el Ministerio de Seguridad y la Presidencia de la Nación;
Confirma que el Estado Argentino está incumpliendo totalmente el Convenio número 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre Pueblos Indígenas y Tribales y la Declaración de Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas;
Confirma que el Estado Argentino viola los derechos humanos individuales y colectivos de los Pueblos Tribales, negándoles el derecho a sus tierras, salud, justicia y educación, comenzando a excluir y perseguir cada vez más violentamente a estas comunidades oprimidas que en Argentina han sido histórica e impunemente sometidas a genocidio, limpieza étnica y crímenes contra la humanidad;
Confirma que se concuerda con la socióloga Maristella Svampa en que el gobierno argentino no reconoce los derechos humanos de los pueblos aborígenes, haciendo un uso ilegal y desproporcionado de las fuerzas de seguridad;
Confirma que durante la ceremonia de entierro de Santiago Maldonado, por medio de un mensaje cuasi-mafioso, el Estado Argentino entró en territorio mapuche de la Comunidad Winkul Mapu con la orden de nuevamente atacar con violencia a los miembros de esta comunidad, produciendo varios heridos graves e incluso asesinando al joven Rafael Nahuel por la espalda, mientras la comunidad mapuche se encontraba realizando ceremonias vitales de iniciación espiritual que están protegidas por la Constitución Nacional Argentina;
Confirma que a raíz del análisis de las manifestaciones públicas realizadas por parte de la Ministra Patricia Bullrich y el Presidente Mauricio Macri, es evidente que el homicidio del joven mapuche Rafael Nahuel fue una ejecución extrajudicial ordenada por las más altas esferas del Estado Argentino en el marco de un operativo militar caracterizado por los testigos como una carnicería;
Confirma que se concuerda con Diego Morales, director del Área de litigio y defensa legal de la organización CELS, en repudiar la actitud del gobierno argentino de militarizar el sur del país, rico en recursos naturales, además de que se estaría construyendo una falsa imagen sobre la comunidad mapuche como un grupo armado terrorista;
Confirma que si bien la Argentina tiene prohibida la pena de muerte, los principales exponentes del gobierno argentino, como su ministra de seguridad, su vicepresidente y su presidente, han manifestado públicamente que el asesinato de Rafael Nahuel en territorio sagrado mapuche fue una acción legal y legítima totalmente enmarcada en la ley, incluso afirmando que no se tiene que probar lo que hacen las fuerzas de seguridad;
Confirma que increíblemente según el gobierno argentino su actuación represiva y homicida fue un buen accionar debido a que en las encuestas la mayoría de las personas consideraría que el gobierno actuó bien, ignorando que mirar encuestas constituye el modo más ilegal de administrar la justicia y la vida de la sociedad, desarrollando un populismo neofascista de derecha que es a los pueblos aborígenes y tribales lo que el gobierno estadounidense es a los inmigrantes y refugiados;
Confirma que el gobierno argentino está estigmatizando a la comunidad mapuche, llamándola “los violentos” e incluso denominándola como un grupo terrorista, lo cual se asemejaría a la política represiva del gobierno de Chile;
Confirma que se concuerda con el escritor Pedro Cayuqueo en que los gobiernos de Argentina y Chile son negligentes por fallar en resolver pacíficamente los conflictos que tienen con las comunidades mapuches, recurriendo a la vía violenta en lugar de utilizar la vía política o diplomática;
Confirma que se concuerda con el Equipo Nacional de Pastoral Aborigen (Endepa) de la Iglesia Católica en convocar urgentemente al Estado Argentino para que cese su utilización irracional del sistema represivo contra comunidades aborígenes, lo cual constituye una violación de los derechos fundamentales de los pueblos tribales que han sido establecidos en las normas jurídicas de los instrumentos de derechos humanos a nivel local e internacional;
Confirma el apoyo al comunicado de la Confederación Mapuche de Neuquén donde no sólo se repudia el accionar represivo por parte de las fuerzas de seguridad argentinas que asesinaron a Rafael Nahuel, sino que también se considera a las declaraciones del gobierno argentino como un Discurso de Odio y violencia racial que no convoca a la convivencia y el respeto intercultural;
Confirma que en el contexto de la historia argentina el accionar homicida por parte del gobierno constituye una regresión a la violencia política y las ejecuciones extrajudiciales realizadas por la última dictadura militar que asesinó a alrededor de 10 mil personas en el contexto de una supuesta lucha contra grupos terroristas;
Confirma que según el gobierno argentino las supuestas armas del grupo violento de la comunidad mapuche serían lanzas y armas de fuego que nunca se encontraron, demostrando que se está intentando demonizar a una minoría oprimida que carecería de todo tipo de armamento;
Confirma que si bien el gobierno argentino considera que la comunidad mapuche está incurriendo en violencia política, hasta el momento los únicos dos muertos del conflicto han sido miembros de la comunidad mapuche sufriendo represión armada del gobierno argentino;
Confirma que debido a la consideración gubernamental del asesinato de Rafael Nahuel como una acción legítima, este homicidio agravado sería además una ejecución extrajudicial que contaría con la autoría intelectual de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich y del Presidente Mauricio Macri;
Confirma que en Argentina usualmente los presidentes se sienten dueños del país y sienten que tienen impunidad para hacer lo que deseen, incluso aunque esto viole la ley nacional e internacional;
Confirma que a partir de la ejecución extrajudicial del Fiscal Nisman se ha cruzado un límite y el Estado Argentino ha vuelto a realizar asesinatos ilegales con total impunidad, lo cual es un hecho lamentable que se demuestra totalmente con el homicidio de Rafael Nahuel;
Confirma que luego de la ejecución extrajudicial de Rafael Nahuel, tras enterarse que el juez federal Gustavo Villanueva estaba realizando una negociación con la comunidad mapuche, el gobierno argentino impunemente declaró que no iba a aceptar ninguna orden ilegal o antijurídica emitida por el juez, quien buscaba que las fuerzas de seguridad ingresen al territorio mapuche sin armas de fuego;
Confirma que el homicidio de Rafael Nahuel no se trató de un mero caso de uso desproporcionado de la fuerza en la represión de protestas y desalojos de tierras, sino que más bien este homicidio forma parte un plan criminal sistemático del Estado Argentino para atacar la integridad y autodeterminación de los pueblos tribales, incluso garantizando impunidad a los miembros de fuerzas de seguridad para cometer ejecuciones extrajudiciales a las que el Presidente Mauricio Macri considera como un acto legal y legítimo, perpetuando por goteo el antiguo régimen argentino antidemocrático de genocidio y limpieza étnica contra las comunidades aborígenes;
Confirma que el gobierno argentino considera que las comunidades mapuches son grupos violentos que no reconocen la ley argentina, al Estado y la Constitución, cuando en realidad sería el mismo gobierno argentino el que no reconoce los Tratados Internacionales de Derechos Humanos incorporados a su Constitución Nacional;
Confirma que se concuerda con la Mesa Nacional para la Paz y el Diálogo Intercultural en que existe un despojo histórico de todos los pueblos tribales de Argentina, a los cuales se les ignora su preexistencia y se los considera como meros grupos minoritarios;
Confirma que el médico Ramón Chiocconi no sólo ha sido testigo directo de los mapuches heridos y de que la comunidad mapuche está sufriendo segregación social desde hace siglos, sino también siendo testigo del importante valor espiritual que para el Pueblo Mapuche representan sus territorios, confirmándose que según el gobierno argentino la comunidad mapuche es un grupo ilegal sólo por desear recuperar sus territorios ancestrales, a pesar de que la ley argentina permite que puedan recuperarlos;
Confirma que la comunidad mapuche denuncia que el gobierno argentino está intentando privatizar algunos parques nacionales, por lo que la intención de las comunidades tribales sería resguardar armónicamente esos espacios sagrados;
Confirma que el accionar del gobierno argentino está violando los derechos humanos más fundamentales, como el derecho a la vida, el derecho a la cultura y el derecho a la paz, por lo que merece el repudio más enérgico por parte de la comunidad internacional;
Confirma que en el 2015 el Tribunal Budista de Derechos Humanos ya ha sentenciado al Estado Argentino por violaciones a los derechos humanos de los Pueblos Tribales, lo cual debería ser revalidado por organizaciones internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos;
Confirma que el grupo Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) no es una organización terrorista sino una comunidad que lucha por los derechos del Pueblo Mapuche por medio de técnicas de acción directa, cuya utilización de este recurso se debe a la desesperación e impunidad que sufre esta comunidad oprimida a la que se le vulneran sus derechos de forma sistemática;
Confirma que la Comunidad Budista condena todo tipo de violencia, recurriendo a las poderosas armas de la ética humanitaria, la sabiduría compasiva y la contemplación activa para hacer frente a la injusticia;
Confirma que los Pueblos Tribales no son los propietarios originarios de las tierras, sino que más bien son realmente los genuinos guardianes de la Madre Tierra, existiendo como una parte integral de las tierras en lugar de existir de forma depredadora como la mayoría de los Estados del mundo;
Confirma que se ordena a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la cual ha ignorado violaciones a los derechos humanos de la Comunidad Budista, que actúe urgentemente y con todos los instrumentos de la ley para detener la conducta violenta y criminal del gobierno argentino, salvaguardando el derecho a la vida y el derecho a la paz de todos los pueblos tribales de la Argentina.
Siempre con espíritu de reconciliación (maitri),
Maestro Maitreya Samyaksambuddha
Juez y Presidente del Tribunal Budista de Derechos Humanos

07 de Diciembre de 2017

miércoles, 6 de diciembre de 2017

NOTIFICACIÓN al Arzobispo Paul Tschang In-Nam (Delegado Apostólico de Myanmar)

CASO 36-2017: Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar) & Su Eminencia Cardenal Charles Maung Bo

NOTIFICACIÓN al Arzobispo Paul Tschang In-Nam (Delegado Apostólico de Myanmar)

En el día 05 de Diciembre de 2017, el Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos se comunica con Su Eminencia el Arzobispo Paul Tschang In-Nam, Delegado Apostólico de Myanmar, a raíz de la Sentencia que se ha efectuado contra la Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar) & Su Eminencia Cardenal Charles Maung Bo por los delitos de Complicidad con el Genocidio, Limpieza Étnica y Crímenes contra la Humanidad, Complicidad con Crímenes contra la Paz y Fraude Espiritual, lo cual fue sentenciado a partir de las muestras de apoyo público que se han efectuado hacia la dictadura cívico-militar de Myanmar liderada por los genocidas Aung San Suu Kyi y Ming Aung Hlaing. A pesar de que el Estado de Myanmar está cometiendo Altos Crímenes contra la Paz Mundial, parece estar recibiendo apoyo público por parte de las más altas esferas de la Iglesia Católica, lo cual es una complicidad que debe ser anulada inmediatamente.
El Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos considera claramente que el Estado Vaticano debería estar del lado de los oprimidos, del lado de las cientos de miles de mujeres y niños del Pueblo Rohingya  que son violados y asesinados por parte de la dictadura genocida de Myanmar. El Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos solicita a la Iglesia Católica que intervenga con rectitud y nunca con complicidad hacia los poderes mundanos que están destruyendo el mundo, pues de lo contrario habrá un histórico Juicio Final.

Con espíritu de Reconciliación (Maitri),
S.E. Maestro Maitreya Samyaksambuddha

Presidente y Juez del Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos

NOTIFICACIÓN al Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica

CASO 32-2017: TRIBUNAL ECLESIASTICO NACIONAL, TRIBUNAL INTERDIOCESANO DE BUENOS AIRES & SACERDOTE JULIO CESAR GRASSI

NOTIFICACIÓN al Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica

En el día 05 de Diciembre de 2017, el Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos se comunica con Su Eminencia Monseñor Dominique Mamberti del Supremum Tribunal Signaturae Apostolicae (Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica), a raíz de la Sentencia que se ha efectuado contra el Tribunal Eclesiástico Nacional (Argentina) &Tribunal Interdiocesano de Buenos Aires  por los delitos de Violación al Derecho Humano a la Justicia, Fraude Espiritual y Falso Cristianismo, lo cual fue sentenciado a partir de las muestras de apoyo público que se han efectuado hacia el Sacerdote pedófilo Julio Cesar Grassi, incumpliendo con el deber de proveer justicia a las víctimas y simultáneamente mantener la pureza ética del sacerdocio. A pesar de que el Estado Argentino juzgó a Grassi como culpable de pedofilia, la Iglesia Católica lo ha defendido durante varios años e incluso nunca ha decidido anular su condición de sacerdote. Esto no sólo viola los derechos humanos, sino también quebranta la Espiritualidad fundada por Jesús de Nazaret.
El Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos considera claramente que el Estado Vaticano debe inmediatamente juzgar y sentenciar a Grassi, quitándole su condición de sacerdote, lo cual podrá comenzar a subsanar el marco de impunidad eclesiástica que ha gozado este criminal y falso sacerdote. Además, el  Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos solicita a la Iglesia Católica que solicite disculpas públicas a las víctimas de Julio Cesar Grassi, las cuales han sufrido persecuciones y amenazas durante varios años. En caso de continuar manteniendo el rango de sacerdote a dicho pedófilo, el Vaticano estaría incurriendo en una complicidad explícita con tales crímenes.

Con espíritu de Reconciliación (Maitri),
S.E. Maestro Maitreya Samyaksambuddha

Presidente y Juez del Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos

martes, 5 de diciembre de 2017

Acta sobre Misión de la Santa Sede ante la ONU

Caso n° 20/2016: Organización de las Naciones Unidas (ONU) & Secretario General Ban Ki-moon

Acta sobre el PERMANENT OBSERVER MISSION OF THE HOLY SEE TO THE UNITED NATIONS (UN)

En el día 05 de Diciembre de 2017 se realiza un Acta de Repudio internacional hacia las afirmaciones realizadas por Su Excelencia Arzobispo Bernardito Auza, Nuncio Apostólico de la Santa Sede en las Naciones Unidas (UN) y en la Organización de Estados Americanos, quien en el día 30 de Octubre de 2017 ha avalado públicamente el accionar de las operaciones de Peacekeeping de la ONU, a pesar de que esta organización ha sido sentenciada por el Tribunal Budista de Derechos Humanos por los delitos de GENOCIDIO, CRÍMENES CONTRA LA HUMANIDAD, CRÍMENES DE GUERRA, CORRUPCIÓN, VIOLACIÓN DEL DERECHO INTERNACIONAL DE LOS DERECHOS HUMANOS y ALTOS CRÍMENES CONTRA LA PAZ MUNDIAL.
La Santa Sede ha manifestado que cree en el rol central de la ONU para la mantención de la seguridad y paz internacional, incluso alegando que las operaciones de Peacekeeping de la ONU son un instrumento indispensable y ha contribuido a la resolución de muchos conflictos armados. El Tribunal Budista de Derechos Humanos confirma una vez más que la Santa Sede está realizando un silencio cómplice ante las más terribles violaciones a los derechos humanos, pues se ha podido demostrar que los oficiales de la ONU han violado los ideales y principios de la organización, realizando de forma sistemática y generalizada un marco de impunidad para abusos sexuales, tráfico de personas y esclavitud sexual de mujeres y niños, asesinatos en masa de civiles, sanciones o bloqueos genocidas, militarismo y falso humanitarismo.
La Santa Sede ha manifestado que enfatiza la protección de civiles por parte de las operaciones de Peacekeeping de la ONU, a pesar de que existen numerosas evidencias de que esta organización ha exterminado la vida de cientos de miles de civiles. El Tribunal Budista de Derechos Humanos confirma que la Santa Sede no utiliza sus multimillonarios recursos en el reconocimiento y lucha contra los grandes males del mundo, ni tampoco realiza una diplomacia de prevención, mediación y reconciliación, sino que más bien casi siempre se hace aliada de los poderes de turno, apoyando al status quo incluso cuando se cometan genocidios y crímenes de lesa humanidad como los que ha hecho las fuerzas de Peacekeeping de la ONU. La Paz Verdadera nunca emergerá de ningún tipo de ejército, ni tampoco de políticos corruptos ni de religiosos pedófilos, pues la Paz Verdadera emerge de la lucha contra la codicia, el odio y el engaño. En definitiva, la Paz Verdadera emerge del humanitarismo, el amor y la Verdad. Sólo por medio de un Camino de rectitud se podrán evanescer los males del mundo, como la guerra, la injusticia, la ignorancia y la contaminación. Esto requiere que los líderes mundiales, sean políticos o religiosos, no apoyen y no contribuyan a los crímenes internacionales, no formando parte del mal al que deberían combatir. En este sentido, en lugar de apoyar a las fuerzas de Peacekeeping de la ONU, la Santa Sede debería solicitar que esta organización sea llevada ante la justicia internacional, siendo debidamente investigada y condenada por los graves crímenes que ha cometido contra cientos de miles de personas indefensas, en su mayoría niños, como ha sucedido en Irak, Haití y África. Mientras exista impunidad en violaciones a los derechos humanos cometidos por los ricos y poderosos, este mundo estará condenado al Apocalipsis. Si la Santa Sede decide ignorar el Camino de autosacrificio por la Verdad, el Amor y la Justicia que desarrolló el Maestro Jesús, esto tendrá consecuencias éticas y espirituales que quedarán en la memoria de toda la humanidad por miles de años.

Siempre con espíritu de reconciliación (maitri),
Maestro Maitreya Samyaksambuddha

Presidente y Juez del Comité Internacional de Ética Budista y Tribunal Budista de Derechos Humanos

Acta sobre el CATHOLIC BISHOPS' CONFERENCE OF MYANMAR (CBCM)

CASO 36-2017: Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar) & Su Eminencia Cardenal Charles Maung Bo

Acta sobre el CATHOLIC BISHOPS' CONFERENCE OF MYANMAR (CBCM)

En el día 04 de Diciembre de 2017 se realiza un Acta de Repudio internacional hacia la organización CATHOLIC BISHOPS' CONFERENCE OF MYANMAR (CBCM), debido a que en las evidencias analizadas por el Tribunal Budista de Derechos Humanos se ha podido comprobar que al igual que la Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar) & Su Eminencia Cardenal Charles Maung Bo, la CBCM ha avalado mantener silencio cómplice ante el genocidio, limpieza étnica y crímenes de lesa humanidad realizados por el Estado de Myanmar contra el Pueblo Rohingya. El Cardenal Charles Maung Bo, quien es miembro del CATHOLIC BISHOPS' CONFERENCE OF MYANMAR (CBCM), incluso ha llegado a apoyar explícitamente a la genocida y líder de facto Aung San Suu Kyi, lo cual ha generado que él sea sentenciado por Complicidad con Crímenes contra la Paz y Fraude Espiritual.
Por lo tanto, se confirma que la CATHOLIC BISHOPS' CONFERENCE OF MYANMAR (CBCM) constituye una organización fraudulenta que está siendo cómplice de los peores crímenes internacionales, como el genocidio, limpieza étnica y crímenes de lesa humanidad. Por ello, la organización CATHOLIC BISHOPS' CONFERENCE OF MYANMAR (CBCM) debería dejar de ser cómplice silencioso, comenzando a denunciar públicamente los crímenes realizados por el Estado de Myanmar y solicitando que los genocidas Aung San Suu Kyi, Ming Aung Hlaing y el State Sangha Maha Nayaka Committee rindan cuentas ante la justicia, promoviendo su investigación y condena por crímenes internacionales, en lugar de prepararles visitas y apoyos públicos por parte del Papa Francisco I.

Siempre con espíritu de reconciliación (maitri),
Maestro Maitreya Samyaksambuddha

Presidente y Juez del Comité Internacional de Ética Budista y Tribunal Budista de Derechos Humanos

domingo, 3 de diciembre de 2017

PRONUNCIAMIENTO sobre Ataque al Sufismo

Caso 04-2015: ISIS

PRONUNCIAMIENTO sobre Ataque al Sufismo

28 de Noviembre de 2017
En primer lugar, el Tribunal Budista de Derechos Humanos confirma que el grupo llamado ISIS ha continuado realizando actos terroristas a lo largo del mundo entero, lo cual ha agravado la Sentencia previa que se ha realizado contra ellos por los cargos de genocidio, limpieza étnica y crímenes de lesa humanidad.
En segundo lugar, el Tribunal Budista de Derechos Humanos continúa denunciando que el grupo ISIS es un Falso Islam, violando los derechos humanos de mujeres y niños pero también traicionando las enseñanzas espirituales de los grandes profetas musulmanes.
En tercer lugar, el Tribunal Budista de Derechos Humanos se expide nuevamente acerca de la falsedad ideológica y religiosa del grupo ISIS debido a su reciente ataque terrorista realizado contra una mezquita sufí Al Rauda en Egipto, que en el día 24 de Noviembre de 2017 llegó a causar más de 300 muertos, no sólo detonando una bomba sino también realizando cientos de disparos desde la calle.
En cuarto lugar, el Tribunal Budista de Derechos Humanos decide que este acto terrorista supuestamente causado por el ISIS constituye no sólo un crimen de lesa humanidad sino también un acto de genocidio, intentando exterminar parcial o totalmente a un grupo religioso protegido por la Convención de prevención y sanción del delito de Genocidio.
En quinto lugar, el Tribunal Budista de Derechos Humanos se solidariza con el Pueblo de Egipto y con los miles de familiares de las víctimas de este ataque terrorista genocida que constituye el ataque más terrible en la historia de este país.
En sexto lugar, el Tribunal Budista de Derechos Humanos denuncia que si bien el grupo ISIS considera al Sufismo como un movimiento herético, en realidad es el mismo ISIS el que verdaderamente comete constantemente herejías que pervierten o destruyen el patrimonio espiritual del Islam.
En séptimo lugar, el Tribunal Budista de Derechos Humanos recuerda una vez más que la Comunidad Espiritual Sufí es probablemente el producto de la síntesis mística entre Budismo e Islamismo, motivo por el cual constituye un movimiento que debe ser totalmente respetado y apreciado como símbolo de la paz social y armonía intercultural.
En octavo lugar, el Tribunal Budista de Derechos Humanos solicita al Pueblo de Egipto que no realice ejecuciones extrajudiciales de sospechosos de terrorismo, pues el mal nunca debe ser combatido con el mal, debiéndose llevar a los responsables ante la justicia internacional como verdaderos responsables de actos genocidas.
En noveno lugar, el Tribunal Budista de Derechos Humanos critica al documento rabínico llamado “Entre Jerusalén y Roma” donde se identifica al Islam radical como un mal contemporáneo, ignorando que en realidad los movimientos terroristas constituyen totalmente un Falso Islam, del mismo modo que no existe ningún tipo de Budismo radical sino más bien un Falso Budismo.
Todos estos nueve puntos demuestran nuevamente que el Tribunal Budista de Derechos Humanos continuará denunciando los genocidios realizados contra los hermanos musulmanes de todo el mundo, como es el caso del Pueblo Rohingya o el caso reciente de la Comunidad Sufí.

Siempre con espíritu de reconciliación (maitri),
Maestro Maitreya Samyaksambuddha

Juez y Presidente del Tribunal Budista de Derechos Humanos

NOTIFICACIÓN al Ministerio de Educación de Sri Lanka

Caso n° 35/2017: University of Kelaniya

NOTIFICACIÓN al Ministerio de Educación de Sri Lanka

En el día 28 de Noviembre de 2017, el Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos se comunica con el Ministerio de Educación de Sri Lanka a raíz de la Sentencia que se ha efectuado contra la University of Kelaniya por los delitos de Plagio y Violación al Patrimonio Cultural, lo cual fue sentenciado a partir de que dicha Universidad ha plagiado a la disciplina del “Psicoanálisis Budista” desarrollada por la Comunidad Maitriyana. A pesar de que se le ofreció a la University of Kelaniya otorgarles permiso para enseñar esta disciplina con la condición de que reconozcan la autoría de los genuinos creadores, ellos se han rehusado y han decidido ignorar al sistema del Derecho Budista, a pesar de que técnicamente son una Universidad Budista.
El Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos considera claramente que el Ministerio de Educación de Sri Lanka debería mediar en este conflicto y supervisar que la University of Kelaniya no cometa delitos. El Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos solicita al Ministerio de Educación de Sri Lanka que intervenga y recomiende a la University of Kelaniya que pidan disculpas públicas por sus infracciones contra el patrimonio cultural intangible de la Comunidad Maitriyana.

Con espíritu de Reconciliación (Maitri),
S.E. Maestro Maitreya Samyaksambuddha

Presidente y Juez del Comité Internacional de Ética Budista & Tribunal Budista de Derechos Humanos


sábado, 2 de diciembre de 2017

Sentencia del Caso "Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar) & Su Eminencia Cardenal Charles Maung Bo"


CASO 36-2017: Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar) & Su Eminencia Cardenal Charles Maung Bo
SENTENCIA ÉTICA
Estimados Fiscal, Defensor Público, Embajador y Miembros del Jurado del Comité Internacional de Ética Budista (CIEB) y Tribunal Budista de Derechos Humanos (TBDH), respecto del Caso 36-2017 contra Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar) & Su Eminencia Cardenal Charles Maung Bo, por medio de la presente, en el día 27 de Noviembre de 2017, se deja constancia de que se ha concluido el juicio para analizar la violación a los Derechos Humanos y la Ética Budista realizada por el acusado. Este Caso ha sido llevado a cabo como consecuencia de Caso Ashin Wirathu”, el “Caso Myanmar” y el “Caso State Sangha Maha Nayaka Committee”.
Luego del análisis de la presentación del Caso y la validación de pruebas, se ha procedido con la votación de 6 miembros del Jurado, confirmándose que todos han votado Responsable a Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar) & Su Eminencia Cardenal Charles Maung Bopor los graves delitos de Complicidad con el Genocidio, Limpieza Étnica y Crímenes contra la Humanidad, Complicidad con Crímenes contra la Paz y Fraude Espiritual.
A pesar de que el grupo Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar)y su líder Cardenal Charles Maung Bohan sido testigos directos de genocidio, limpieza étnica y crímenes contra la humanidad realizados por el gobierno de Myanmar, han decidido apoyar pública y reiteradamente a dicho gobierno criminal y dictatorial, lo cual constituye un acto de Complicidad en graves violaciones a los derechos humanos. Además, el grupo Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar)y su líder Cardenal Charles Maung Bohan llegado a atreverse a revalidar estos crímenes por medio de la utilización de conceptos budistas, lo cual constituye un Fraude Espiritual, usurpando ilegalmente la Espiritualidad Budista para avalar éticamente a un gobierno criminal y genocida, lo cual también implica una traición absoluta a las enseñanzas del Maestro Jesús de Nazaret. De este modo, el Tribunal Budista de Derechos Humanos declara que el grupo Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar)y su líder Cardenal Charles Maung Boson un movimiento espurio, inmoral e ilegal, dedicándose más bien a la política en lugar de dedicarse a realizar enseñanzas espirituales y guías éticas o humanitarias. Así, el Tribunal Budista de Derechos Humanos ha implementado la jurisprudencia utilizada en el “Caso ISIS”, “Caso State Sangha Maha Nayaka Committee”, “Caso Tribunal Eclesiástico Nacional” y “Caso Aum Shinrikyo & Aleph”, denunciando como ilegales a movimientos supuestamente religiosos que se dedican a avalar crímenes internacionales.
Por otra parte, a raíz de la solicitud pública realizada por el grupo Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar)y su líder Cardenal Charles Maung Bo”, el hecho de que la reciente visita del Papa Francisco I a Myanmar haya ocurrido en un clima de aceptación a no mencionar la palabra “Rohingya”, además de aceptar reunirse en privado con el líder militar genocida Ming Aung Hlaing implica un fuerte respaldo ético a la dictadura cívico-militar de Myanmar liderada por Aung San Suu Kyi. En lugar de denunciar al terrible genocidio, limpieza étnica y crímenes contra la humanidad realizados en Myanmar, en lugar de solicitar la intervención internacional urgente, la Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar)y su líder Cardenal Charles Maung Bo han decidido brindar apoyo moral y público a un gobierno genocida que está cometiendo los peores crímenes internacionales contra hombres, mujeres y niños indefensos, requiriendo además que el Vaticano conceda un silencio omisivo ante el genocidio. De hecho, estos actos de silencio omisivo e incluso complicidad por parte de las más altas esferas del Poder Católico se han podido analizar en otros Casos sentenciados por el Tribunal Budista de Derechos Humanos, como el “Caso Argentina” y el “Caso Venezuela”, donde el Vaticano ha sostenido y legitimizado a gobiernos criminales. Sin embargo, en esta oportunidad, la complicidad es tan grave como la relación que mantuvo el Poder Católico con el Imperio del Nazismo. La visita a Myanmar por parte del Papa Francisco I en un clima de silencio ante el Holocausto Rohingya, visitando al líder de facto Aung San Suu Kyi, al jefe de las fuerzas armadas Ming Aung Hlaing e incluso al State Sangha Maha Nayaka Committee, resulta de una gravedad tan profunda como si el Papa hubiese visitado a Adolf Hitler, a Heinrich Himmler y al escuadrón SS del Nazismo simultáneamente accediendo a no mencionar la palabra “judío” mientras ocurría el genocidio. De hecho, el silencio del Papa Pío XII durante el Nazismo, omitiendo denunciar el exterminio contra el Pueblo Judío, ha sido una de los episodios más vergonzosos en la historia de la Cristiandad. Este nuevo silencio ante el genocidio del Pueblo Rohingya constituye una nueva demostración de la inmoralidad e hipocresía de las más altas esferas del Poder Católico Vaticano.
La Comunidad Maitriyana le ofrece al acusado Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar)y su líder Cardenal Charles Maung Bo esta Sentencia Ética como modo de enseñanza sobre cómo se comporta verdaderamente una Espiritualidad Recta y Adecuada (Samma-Sasana), lo cual claramente no es practicado por el alto Poder Católico mundial, realizando silencios cómplices ante abusos sexuales y asesinatos a menores de edad. Los miembros de este grupo religioso deben aprender rápidamente que es muy sencillo denunciar los genocidios 50 o 100 años después de que han ocurrido. Los genocidios, las limpiezas étnicas y los crímenes contra la humanidad deben ser denunciados mientras ocurren, intentando que la humanidad deje de hacer el mal, comience a hacer el bien y purifique su mente. Esa es la enseñanza de todos los Seres Despiertos y Salvadores (Buddhas-Cristos), tal y como se enseña en el Dhammapada. La tarea mesiánica de los Seres Libres e Iluminados (Arhats-Bodhisattvas) es comprometerse inquebrantablemente con la Salvación de todos los seres sintientes, nunca pactando silencio con los poderes políticos de turno. Un genuino maestro espiritual debe estar dispuesto a autosacrificarse por la Verdad, estando dispuesto incluso a ser aniquilado por denunciar a los males del mundo, tal y como lo hizo el Maestro Jesús, quien comprendió perfectamente que la expresión de lo divino es la Compasión y la Justicia.
Debido a que la solicitud presentada ante el Papa Francisco I para que no mencione la palabra “Rohingya” ha sido realizada tanto por la Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar)y su líder Cardenal Charles Maung Bocomo también por la CATHOLIC BISHOPS' CONFERENCE OF MYANMAR (CBCM), esto demuestra que el presente Caso no se trata de un mero error individual sino que más bien expresa una política institucional de Complicidad con el Genocidio, Limpieza Étnica y Crímenes contra la Humanidad, Complicidad con Crímenes contra la Paz y Fraude Espiritual. Además, se recuerda que el silencio cómplice que se mantiene con respecto al genocidio del Pueblo Rohingya por parte del Estado de Myanmar, bajo la excusa de que eso pondría en peligro a las minorías cristianas del país, tiene la misma excusa que el silencio cómplice del Papa Pío XII durante el genocidio del Pueblo Judío por parte del Imperio Nazi, con el cual incluso se llegó a firmar un concordato o pacto internacional de apoyo. Ante este tipo de políticas cómplices de graves violaciones a los derechos humanos por parte del Poder Católico, se recuerda que el Maestro Jesús nunca pactó con los poderes políticos y económicos de su época.
El Tribunal Budista de Derechos Humanos concuerda con  el padre Bernardo Cervellera en que detrás del genocidio y limpieza étnica contra el Pueblo Rohingya se encuentran poderosos intereses económicos, ya que en las zonas donde vive este pueblo perseguido no sólo existen muchos recursos naturales valiosos, sino que además sería la zona por donde pasaría un oleoducto para transportar petróleo a China. Por ello, detrás de estos terribles crímenes contra la humanidad no existe un mero odio religioso hacia minorías musulmanes, sino que más bien existen poderosos intereses políticos y económicos para beneficiar a las elites militares nacionales e internacionales. En este sentido, realizar visitas papales al gobierno genocida de Myanmar y a sus líderes cívico-militares Aung San Suu Kyi y Ming Aung Hlaing en un marco de silencio omisivo ante violaciones a los derechos humanos es una señal de cercanía con los poderes corruptos y una señal de la muerte de la esperanza para las cientos de miles de víctimas que sufren limpieza étnica, asesinatos masivos y abusos sexuales de forma sistemática y generalizada. El Tribunal Budista de Derechos Humanos coincide con el Sacerdote Reese, comisionado del U.S. Commission on International Religious Freedom, en que el silencio del Papa Francisco I ante la persecución contra el Pueblo Rohingya lo hace perder credibilidad moral. El Tribunal Budista de Derechos Humanos establece que aquellos que pretenden ser la brújula moral del mundo deben tener purificada la mente, la palabra y la acción, desarrollando la misión de los grandes campeones de la Paz (Shalom). No obstante, en caso de que aquellos que poseen poder mundano simplemente transmitan discursos bonitos pero que no condicen con sus acciones, entonces serán parte de los males del mundo, siendo genuinos representantes de la codicia, el odio y el engaño.
El Maitriyana concuerda con el Cristianismo Verdadero en que lo divino requiere al sujeto que actúe justamente y ame misericordiosamente mientras se transita con humildad por el Camino (Miqueas 6:8). Esto significa que el Derecho Budista, al igual que los profetas y el Maestro Jesús, enseña el mandamiento de amar al prójimo como a uno mismo (Mateo 22:39). Por ello, el Maitriyana y el Cristianismo Verdadero conforman un Camino en el cual la justicia y el amor se unen. El Derecho Budista no considera que la justicia y el amor sean valores y objetivos opuestos, pues sus sentencias son cálidas y misericordiosas. De esta manera, el Maitriyana y el Cristianismo Verdadero se diferencian de los grupos religiosos que consideran al amor de forma sentimental y que se muestran indiferentes ante el mal comportamiento. El Derecho Budista ofrece una visión de sabiduría con compasión, una visión justicia con misericordia, la cual es la parte fundamental de lo divino. En efecto, el Maitriyana y el Cristianismo Verdadero concuerdan en que lo divino es la experiencia de un juez recto (Salmo 7:7, 2 Timoteo 4:8) y simultáneamente es la experiencia del amor (1 Juan 4:8), estando ambas sintetizadas en la experiencia del Despertar (Bodhi), como mostró el Maestro Gautama en el árbol, pero también estando sintetizadas en la experiencia del autosacrificio, como mostró el Maestro Jesús en la cruz. En consecuencia, el Derecho Budista es un sistema donde se busca la reconciliación entre víctimas y agresores, construyendo una comunidad de amor y justicia restaurativa, los cuales son elementos integrales de lo divino e incluso el Propósito (Dharma) sagrado de la vida. Sólo por medio de este principio y práctica de unidad entre justicia y amor es que las heridas pueden ser sanadas realmente. El Maitriyana y el Cristianismo Verdadero buscan que se juzgue rectamente al mundo, que se gobierne a los pueblos con justicia, y que se brinde refugio a los oprimidos (Salmo 9:7-9). Sin embargo, las cortes estatales no suelen impartir una justicia que trate de forma justa a las personas, pues las cortes estatales suelen discriminar y brindar impunidad a los ricos y poderosos. Por ello, es totalmente necesario el Derecho Budista para mantener pura a la práctica de la justicia, que realmente es la práctica del amor. El Maitriyana y el Cristianismo Verdadero denuncian a las injusticias, buscando que las cortes no perviertan a la justicia por medio de favoritismos a los ricos o parcialidades a los pobres (Levítico 19:15), debiéndose desarrollar relaciones justas, buenas e íntegras. Así, la unidad de justicia y el amor es lo que el Maitriyana y el Cristianismo Verdadero denominan como Paz (Shalom), que no es la ausencia de conflicto sino más bien la presencia de bienestar y plenitud espiritual. La Justicia y el Amor que promueve el Derecho Budista son tanto la base como el producto de esta Paz (Shalom) sagrada, buscando que toda la humanidad erradique el mal, instale el bien y purifique su interior. Sin embargo, el Maitriyana y el Cristianismo Verdadero afirman que la naturaleza intrínseca de la humanidad es la bondad, por lo que la justicia y el amor no hacen más que expresar la naturaleza divina o Propósito (Dharma) del Ser, logrando el bienestar espiritual y la paz restaurativa en las relaciones entre la humanidad y la totalidad. El Derecho Budista no se trata entonces de simplemente seguir reglas y realizar castigos, sino que más bien se trata de transmitir el conocimiento del amor compasivo, el cual es la experiencia de lo divino (Salmo 103:8, 1 Juan 4:8). Esta experiencia del amor no tiene ningún paralelo con los sentimientos o emociones ordinarias, siendo más bien una práctica de amor hacia la rectitud y la justicia (Salmo 33:5). El Maitriyana y el Cristianismo Verdadero buscan crear un mundo de amor y justicia donde los pueblos resuelvan sus conflictos de forma armónica y no-violenta, evolucionando por medio del apoyo mutuo y la interexistencia. Únicamente por medio de esta sabiduría compasiva (prajña-karuna) que une justicia y amor es que la humanidad podrá evanescer los males del mundo y alcanzar la Ascensión hacia el Reino de la Rectitud en la Tierra. No obstante, sin Despertar ni Autosacrificio, tal y como enseñaron los Maestros Gautama y Jesús, nunca habrá justicia ni amor, sino que sólo existirán meras leyes y sentimientos. El poder reconciliador del Derecho Budista es que reconoce la Verdad de las víctimas y simultáneamente ofrece oportunidad de redención a los agresores. Los maestros espirituales Gautama y Jesús mostraron que el mundo puede ser salvado cuando se unen la justicia y el amor, transformando la relación que la humanidad tiene tanto consigo misma como con el resto del Cosmos. El Maitriyana y el Cristianismo Verdadero tienen este fascinante poder de reconciliación y justicia restaurativa, mostrando que en realidad la humanidad nunca se fue del Edén, sino que más bien olvidó que la Madre Tierra es el genuino paraíso. De este modo, la Vía Única de Liberación y Salvación siempre acontece en el aquí y ahora, nunca en una existencia metafísica, realizando la Verdad de la vida por medio de la contemplación activa, la sabiduría compasiva y la ética humanitaria. Este Camino transforma espiritualmente el mundo interno y externo, permitiendo la unidad entre el sujeto y el prójimo. En definitiva, no existe transformación sin Verdad y Justicia, pero tampoco existe Justicia verdadera sin altruismo y amor, buscando la prevención de los conflictos y la restauración de la salud y Paz (Shalom). El Derecho Budista es un servicio esperanzador porque utiliza la mediación, la conciliación y la justicia restaurativa, en lugar de creer que la justicia puede ser alcanzada por medio de penas de prisión o penas económicas. El Maitriyana y el Cristianismo Verdadero insisten en que las cortes judiciales deben ser humanistas y restaurativas, buscando la reintegración y reconciliación en lugar del castigo y la marginación.
Por otra parte, el Derecho Budista coincide con el Islam en que la justicia es una precondición para la existencia de la sociedad, motivo por el que se prioriza una visión de la justicia social, la gobernanza ética e incluso la justicia ética, buscando virtuosamente armonizar la lucha entre fuerzas opuestas que residen en el mundo psíquico y social. Para el Maitriyana, la justicia verdadera es la realización de la libertad, igualdad y fraternidad, buscando moderar los excesos por medio de la ética del Camino Medio, tal y como enseñaron Gautama y Allameh Tabatabaei. El Derecho Budista muestra la Vía Recta hacia el desarrollo espiritual por medio de la generosidad y la justicia, denunciando en todo momento la corrupción, la ilegalidad y la opresión. El Maitriyana considera que la base de la justicia son los derechos humanos, posicionando a los maestros espirituales como árbitros y líderes éticos verdaderos para poder determinar si los pueblos están comportándose legal o inmoralmente. El Derecho Budista considera que la justicia no sólo es importante para formar una sociedad recta y distributiva sino que también es un pilar fundamental para la supervivencia y salvación de la humanidad. Sin embargo, la justicia siempre se pervertirá sin altruismo, benevolencia y generosidad en todo momento y lugar.
En conclusión, el Tribunal Budista de Derechos Humanos tiene el Propósito (Dharma) de corregir a los movimientos religiosos por medio de la Espiritualidad Verdadera, lo cual implica una crítica directa a los grupos católicos que apoyan directa o indirectamente a la violencia, como los asesinatos y los abusos contra niños. Por lo tanto, se establece que la Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar) & Su Eminencia Cardenal Charles Maung Boha violado a los derechos humanos y a las enseñanzas de los maestros Gautama y Jesús por medio del apoyo a un gobierno dictatorial y genocida que representa uno de los mayores males en la historia de la humanidad, pues el Estado de Myanmar está realizando los peores crímenes internacionales y también está destruyendo al Patrimonio Cultural Budista. Indudablemente, los altos cargos religiosos del Catolicismo deben ser líderes éticos y nunca encubridores que apoyen o avalen delitos contra la sacralidad de la vida humana. El Reino de la Rectitud en la Tierra sólo acontecerá por medio de la Paz (Shalom), y nunca por medio del silencio cómplice con los abusos sexuales y los asesinatos de bebés y niños. Por ello, el Tribunal Budista de Derechos Humanos practica la contemplación, la sabiduría y la ética para poder crear un mundo de compasión. De esta manera, el Caso sobre Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar) & Su Eminencia Cardenal Charles Maung Bo constituye una gran enseñanza para que los católicos dejen de hacer el mal, empiecen a hacer el bien y purifiquen su mente por medio de la fuerza divina de la Justicia y el Amor, en lugar de que predomine los oscuros intereses políticos y económicos.
Siguiendo a los maestros Gautama y Jesús, quienes desarrollaron un Camino de Amor y Justicia que puede atravesar cualquier Holocausto con dignidad y rectitud, el Tribunal Budista de Derechos Humanos supervisa que las religiones no atenten contra la ética y los derechos humanos, nunca traicionando a la Sabiduría Compasiva de lo divino, por lo que se ha sentenciado a la Arquidiócesis Católica de Yangon (Myanmar) & Su Eminencia Cardenal Charles Maung Bo como Responsable de Complicidad con el Genocidio, Limpieza Étnica y Crímenes contra la Humanidad, Complicidad con Crímenes contra la Paz y Fraude Espiritual.
Con espíritu de reconciliación (maitri),
Maestro Maitreya Samyaksambuddha

Presidente y Juez Espiritual del Tribunal Budista de Derechos Humanos